Feria Arco 2019, la polémica está servida. Eugenio Merino y Santiago Sierra, son los artistas responsables de la réplica gigante del rey Felipe VI que desde hoy se exhibe en Madrid (Foto: El País)
Quien tenga 200 mil euros para pagar, podría quemar al rey de España. Hoy se inauguraba en Madrid la importante feria de arte, Arco, donde Perú, mi país natal, es el país convidado, pero la principal atracción del evento ha sido el ‘ninot’ del rey a escala gigante. Quien pueda pagar la suma que exigen sus autores tendrá que quemarlo en el plazo de un mes, luego de su adquisición.
Un ‘ninot’ es un muñeco que es quemado durante la celebración de Las Fallas Valencianas, pero en la vida real, el rey español no es ningún muñeco, es quien en los últimos tiempos, cada vez que ha tenido una tribuna, ha dicho que la unidad de España no es cuestionable y es quien, hace unos días, para asombro de muchos, dijo que la ley estaba por encima de la democracia; sin embargo, la democracia es el gobierno del pueblo y es el pueblo quien se dota de leyes para su desarrollo en libertad y dignidad.
Al parecer el rey de España aún cree que su cargo es consecuencia del llamado ‘derecho divino de los reyes’. Felipe VI parece no haber avanzado con los tiempos y no darse cuenta que ya no somos súbditos sino ciudadanos objetos de derecho, con la capacidad de darnos una marco legal y de modificarlo si hay una gran cantidad de personas que así lo exige. Hace poco, con las protestas de los chalecos amarillos en Francia, el presidente Macron, inteligentemente, escuchó lo que gritaba el pueblo en las calles e intentó dar salida a sus protestas. En España esto no ocurre.
En España hay raperos enjuiciados por las letras de sus canciones en contra de la realeza; hay 8 jóvenes condenados a cumplir entre 2 y 13 años de prisión por una pelea de bar con unos policías de paisano; hay más de 700 alcaldes enjuiciados por dar su apoyo al referéndum de autodeterminación de Catalunya, realizado el 1 de octubre de 2017, y hay 12 políticos y activistas catalanes enjuiciados por rebelión, sedición y malversación, por haber dejado que el pueblo vote. Además una secretaria de estado compara votar con una violación sexual.
Quien compre el ‘ninot’ del rey, será alguien que tenga 200 mil euros que esté dispuesto a hacer humo, puesto en el contrato de compra se incluye la cláusula ‘pirómana’ que obliga a quemar la figura, además deberá tener muchas ganas de purificación o de deshacerse de lo que no le gusta. Según los valencianos, estas son dos de las razones por las que una vez al año queman figuras e instalaciones en las calles de su ciudad. Sea como sea, tarde o temprano el rey arderá. El de Arco ‘off course’.