A un año del bicentenario de la independencia del Perú, seguimos tan colonizados como siempre. El patriarcado instaurado en nuestras tierras por el opresor europeo sigue dominando nuestra vida social, familiar e institucional. No hay resquicio ni espacio, privado ni público, donde la mujer peruana goce de equidad y de dignidad para su desarrollo integral.
(Ilustración: @EmmayYo)
La pandemia desatada por el maldito COVID-19, en una sociedad tan frágil, informal, inestable, racista, caótica y tumbada completamente a la derecha, como la peruana, no ha hecho más que exacerbar las diferencias y opresiones. Los pobres han salido más pobres del confinamiento, los ricos, más ricos; y las mujeres, niñas, niños y adolescentes más abusados y maltratados.
Este 28 de julio, el presidente Martín Vizcarra en su mensaje a la nación ha mencionado los 572 millones de soles destinados a la lucha contra la violencia de género durante este periodo, pero no ha dicho si este dinero se mantendrá, aumentará o disminuirá; el único aumento que ha señalado es la instalación de 20 CEM más, con lo cual estarán presentes en 416 comisarías de todo el Perú.
Vizcarra también ha manifestado que desde el primer día de confinamiento se dio adecuada atención a mujeres, niñas, niños y adolescentes. Según él, esto se refleja en la recepción de 75500 llamadas en la línea 100, destinada para denuncias de violencia de género y violencia intrafamiliar. Sin embargo, recibir una llamada no quiere decir darle la atención que corresponde a cada caso.
Por otro lado el presidente también ha anunciado 3 políticas a cumplir en lo que le queda de mandato: la política nacional para niños y adolescente, la política nacional para discapacitados y la política nacional para el desarrollo, habrá que estar pendientes de estas ‘promesas’, pues son temas vitales para el bienestar de las y los más vulnerables.
En el discurso del presidente sin embargo han faltado las cifras del dolor registradas durante la pandemia. Las de los muertos, que aún contamos, siendo durísimas por irreversibles, no son las únicas:
- Feminicidios 34
- Violación sexual 900, de ellas: 640 a niñas y adolescentes; y 40 a niños y adolescentes.
- Según el MIMP, desde el 16 de marzo hasta el 15 de julio la línea 100 registró 5.546 denuncias de maltrato físico y 4.223 psicológico.
- Según la Defensoría del Pueblo, durante la cuarentena han desaparecido 915 mujeres, de ellas el presidente Vizcarra no dijo nada.
Mujeres, niñas, niños y adolescentes han sido los más afectados por la pandemia. El confinamiento ha rubricado que los mayores delitos en su contra se cometen en el hogar y que los maltratadores, abusadores y asesinos tienen ‘cargo’ familiar. Mujeres, niñas, niños y adolescentes durante casi 4 meses han sido víctimas propicias del poder desquiciado de quienes dicen quererlos.
Por todo este dolor y abuso invisibilizado en las cifras del discurso presidencial, la «Red Brujas de Los Andes», grupo de mujeres feministas, realizó un vídeo para mostrar en nuestros cuerpos las violencias que nos atraviesan, que nos hartan, y que nos hacen vivir en permanente estado de autodefensa, pues a pesar que nuestro himno lo diga, las mujeres en Perú, #NoSomosLibres.