Abuela peruana, denuncia que sus nietas estarían siendo prostituidas por su propia tía

Escrito por: Leonor Pérez-Durand

En Perú, el 81% de víctimas de explotación Sexual y trata de Personas son mujeres y menores de edad. «La mayoría de casos se registran en las regiones de Lima, Madre de Dios, Puno y Tacna. Según las denuncias atendidas por la Fiscalía, el 81% de víctimas son mujeres de entre 12 y 17 años». (Capital Humano y Social (CHS), ONG peruana que aborda temas de explotación humana)

«Tienes que trabajar para darle de comer a tu hermano». «Le decían a mi nieta y la hacían trabajar como cobradora de combi y en eso de la prostitución. A su hermanito lo tienen escondido para prostituir también a mi otra nieta» […] «Yo he denunciado, pero en el CEM me han tratado mal, me han dicho que ya me quede tranquila que son fuerzas superiores las que están detrás».

Adela Llanca Cueva es una abuela desesperada pues según denuncia, sus nietas de 13 y 15 años de edad , estarían siendo prostituidas por su hija mayor, Mariela Gallardo Llanca. «Esas niñas son hijas de mi hija menor, mi Sarita, que murió hace 3 años, ella era drogadicta y yo me hice cargo de sus 3 hijos -dos niñas y un niño- desde que nacieron. Yo tenía su tutela legal, pero a su muerte, mis hijos Mariela y David Gallardo Llanca me los quitaron, se los llevaron sin mi consentimiento y no los tienen bien».

Sustracción sin tutela

«Mi hija Sara, la madre de mis nietos, se murió el 16 de julio de 2018 y el 18 de julio, 48 horas después, mientras yo había ido un momento a casa de la vecina, mis hijos Mariela y David aprovecharon para llevárselos con el pretexto de ir al centro comercial. En ese momento las niñas tenían 15 y 13 años, y el niño de 10. Mariela se quedó con mi nieta mayor y su hermanito, mi hijo David se quedó con la segunda» -asegura Adela.

Adela Llanca denunció la sustracción de sus nietos, sin embargo, dice que no le hicieron caso. «Mi hija mayor comenzó a prostituir a mi nieta de 15 años porque su hija mayor, a la que también he denunciado, también se dedica a eso. Yo supe que estaban prostituyendo a mi nieta de 15 años, P.G.G.LL, porque mi vecina amenazó con pegarle, decía que había ido a ‘inquietar’ a su hija. Otra vecina también me dijo lo mismo».

La abuela hablo con las hijas de sus vecinas y le confirmaron que su nieta había ido con unos chicos y les había dicho para ir a casa de su tía. «Yo denuncié todo porque mi nieta también me lo contó, en venganza en casa de mi hija le cortaron el pelo, le pegaron con manguera y la dejaron en la puerta de mi casa. Volví a denunciar y como el caso avanzaba, mi nuera, Flor Ramírez Carrasco, que vive conmigo, drogó a mi nieta, la amenazaron, se escapó y, asustada volvió a casa de mi hija».

Pero Adela no cejó, siguió luchando por su nieta. La policía la encontró y ella misma pidió ser tutelada por el Estado, por su propia seguridad, así que el INABIF (Instituto Nacional de Bienestar Familiar) la trasladó al Ermelinda Carrera (centro tutelado para niñas). Cuando la adolescente fue rescatada pidió expresamente que sus hermanos menores no estuviesen al cuidado de sus tíos «para que no fuesen prostituidos como le había ocurrido a ella», asegura Adela.

Nin@s en paradero desconocido

Adela Llanca sufre ahora por su nieta A.R.G.LL de 13 años y su hermano, S.L.G.Ll, de 10, ambos estarían en manos de Mariela Gallardo Llanca. «Primero mi nieta menor estuvo en casa de mi hijo mayor, David, y allí la hacían cuidar a sus primos, un niño autista y un bebé, sin importarles que en ese momento ella sólo tenía 11 años. Cuando ella pedía volver conmigo le decían que la llevarían con su tía Mariela o con sus abuelos paternos, a los que ni siquiera conoce», afirma Adela.

Pero la niña se escapó y terminó un día en casa de su abuela. «Llamé a la policía y dije que mi nieta estaba conmigo y me la quedaba porque en ese momento yo tenía su tutela. La volví a poner en el colegio, pero mi hija mayor no la dejaba tranquila, estaba detrás de ella todo el tiempo. Dos meses después, un día me fui a la huerta y cuando volví me dijeron que mi nieta se había ido; fui a preguntar a mi hija, ella y sus hijas me dijeron que seguro se había ido con el novio».

Adela denunció la desaparición de su nieta A.R.G.Ll a la policía y, según asegura, gracias a las cámaras de seguridad de la zona pudieron ver como su nieta mayor, Marjorie, con sus dos hermanas se llevaban a la niña. Desde ese día, Adela no sabe nada de la pequeña y su hija se ha mudado. «Me dicen que ahora vive en La Ensenada, pero no sé, no puedo ubicarla, no se nada de mis nietos y eso me tiene muy preocupada. No sé cómo están. Yo sólo quiero cuidarlos».

Cuando A.R.G.LL escapó de casa de David Gallardo, su tío, le quitaron la custodia de la niña a Adela y se la dieron al mismo tío. «A mí las señoritas que vinieron a mi casa me dijeron que tenía que tener televisión, computadora para que mis nietos estuviesen bien, yo dentro de mis posibilidades les compro, pero que me los devuelvan o los lleven a un centro; porque yo sé que mi hija Mariela es la que en verdad tiene a mi nieta y a su hermanito, y con ellas están en peligro».

Contra denuncia

Adela afirma que también ha sido denunciada por sus hijos que quieren hacerla pasar por desquiciada, incluso, por maltratadora, ella sólo pide que se investigue todo y que se haga justicia. Recordemos que en medio de toda esta complicada historia esto hay 3 niñ@s, dos de los cuales en paradero desconocido para esta abuela. «Por eso mi nieta prefirió ingresar al Ermelinda Carrera, a sus hermanos que los ingresen también si no me los dan. Lo único que quiero es que estén bien» -dice Adela.

Adela Llanca denuncia que su caso no está recibiendo la atención suficiente del CEM de Laura Caller de Lima, donde ha presentado las denuncias por lo que esa ocurriendo con sus nietos. TeleoLeo.com recogió el testimonio de Adela donde ella nos explica su preocupación respecto a la vida que estarán llevando sus nietos. Esperemos que esta abuela sea escuchada y encuentre justicia, porque además están en riesgo la integridad de dos criaturas.

Pasado abusivo

Adela tiene 62 años, pero lo que ha vivido hace que cargue con 100. Ella es una mujer indígena, pobre y sin educación. En ella se ceban todas las desigualdades de un país como el Perú, donde muchos se llenan la boca en decir que el pobre es pobre porque quiere y que a las mujeres del Ande les gusta el golpe y parir.

«Mi vida nunca ha sido fácil», decía esta mujer en su testimonio, donde además de lo que está ocurriendo con sus nietos, explica los abusos de los que habría sido víctima a manos de Alfredo Gallardo Chávez, su esposo, y de su familia política a quienes denunció en 1999 por maltrato y amenaza de muerte.

Adela vive en Lima desde hace mucho tiempo y sin más posibilidades, trabaja ahora como recicladora «hago trabajos decentes y siempre les he enseñado eso a mis hijos, pero su padre ha sido una mala persona en nuestras vidas y el responsable de que Mariela y Sara hayan salido así, él malogró sus vidas desde pequeña» -remarca.

Según Adela, Alfredo Gallardo violó a sus hijas; denunciado y condenado, sólo pasó 2 años en prisión: «Él tiene la culpa de lo que pasó con mis hijas, a Sara, su propia hija, a la que violó cuando tenía 9 años y acabo esclava de las drogas. A Mariela, que era mi hija con otro hombre y a la que él reconoció legalmente, también la violó y ahora ella prostituye a mis nietas y la he tenido que denunciar por maltrato psicológico ».

En 2019, Adela recibió medidas de protección por las denuncias de maltrato que presentó en contra de su hija Mariela Gallardo

A mediados de junio la nieta menor de Adela, A.R.G.Ll, intentó comunicarse con ella para saber como estaba, pero no quiso revelar su paradero. El problema es que estamos hablando de una niña de 13 años de la cual no se sabe el paradero exacto, sólo que presumiblemente estaría con su tía, Mariela Gallardo, de la cual su hermana mayor pidió ser separada porque, según su abuela, la prostituía y maltrataba.

TeleoLeo.com ha intentado obtener la versión de los hechos de cada uno de los denunciados por Adela Llanca en esta nota. Hace varias semanas le enviamos un mensaje a Mariela Gallardo Llanca para saber del paradero de sus sobrinos, pero no hemos recibido respuesta. En las últimas horas también hemos intentado ponernos en contacto con Alfredo Gallardo Chávez, Marjorie Valverde Gallardo y Christiam Saenz Benalcazar, sin embargo, no hemos recibido respuesta alguna.