Otra adolescente denuncia al profesor de taekwondo Angelo Gustavo Meza Vera, por tocamientos indebidos

Texto y vídeo entrevista: Leonor Pérez-Durand/Periodista

«Buenas tardes srta quería conversar con usted y el abogado me dice que no, que ya está todo en la vía judicial, y que según los resultados finales del proceso, se demandará penalmente a las personas que estuvieron involucradas con las calumnias vertidas». Esta es la respuesta de Angelo Gustavo Meza Vera, profesor de taekwondo que cuenta con denuncias por tocamientos indebidos a sus alumnas, todas menores de edad.

Hasta el 29 de febrero pasado, cuanto teleoLeo.com publicó, de forma exclusiva, la primera denuncia en contra de Angelo Gustavo Meza Vera, teníamos conocimiento de 3 denuncias formales, en su contra. La presente nota da cuenta del segundo testimonio recabado por este portal.

Cuando hablamos de que nuestras hijas e hijos practiquen artes marciales, pensamos en disciplina, en autodefensa y contención; en lo mismo deben haber pensado, las madres y padres que apuntaron a su prole a clases con Angelo Gustavo Meza Vera, quien tiene 30 años de trayectoria en el taekwondo, es 3er Dan, es decir, está en el tercer escalón de este arte marcial, el escalón más alto es el noveno; además, tiene el título de promotor deportivo, otorgado por el Instituto Peruano del Deporte.

Otra adolescente de 16 años

«El profesor me ha venido tocando a mí y a mis compañeras, si no te lo dije antes es porque no sabía que eso era malo, porque él siempre lo ha hecho, siempre nos ha tocado, comenzó con los pechos para revisar nuestra frecuencia cardíaca y luego las piernas, decía que era para ver cómo estaban nuestros abductores, y para ver nuestra apertura para las patadas, Así me contó mi hija. y yo no entendía por qué no me lo había dicho antes», dijo María a teleoLeo.com. María es el nombre que daremos a la madre de la segunda denunciante, a fin de mantener su privacidad.

Veinticuatro horas después de lo dicho por la adolescente a su madre, ambas acudieron a la comisaría de San Borja, distrito donde había ido a los talleres que brindaba Meza Vera, a través de la municipalidad. «Allí mi hija lo contó todo, yo me quedé conmocionada, porque lo que me había dicho en casa era sólo tocamientos en las piernas, pero allí, delante del policía, dijo que la última vez que este hombre la había tocado, había sido en un taxi y que le había tocado los genitales por dentro de su ropa interior y para mí eso es una violación».

Esto habría ocurrido a finales de 2023, cuando Meza Vera convocó a su alumnado para un evento. «A través del chat grupal, el profesor citó el nombre de mi hija expresamente para que vaya, porque desde julio iba de manera intermitente, porque ya no quería ir, sin embargo, ante el llamado, acudió. En comisaría dijo que el profesor, al traerla a casa, cosa que él hacía sin haberme consultado, metió su mano bajo sus pantalones y le dijo que conservaba el tono muscular, luego fue subiendo su mano y se la introdujo en la ropa interior».

La cámara Gesell de esta adolescente aún no ha sido programada y esto, tras dos meses de haber presentado denuncia, es revictimizante pues la joven aún no ha podido explicar los detalles de lo ocurrido ni comenzar a sanar. «No le pregunto nada de lo sucedido a mi hija nada, no quiero contaminar sus recuerdos, por ello no está en tratamiento psicológico; y está muy mal, todo el día tirada en la cama, no quiere hacer nada, tiene miedo hasta de salir. Necesitamos que le hagan la cámara Gesell ya», dijo la madre en entrevista concedida a teleoLeo.com.

Sin medidas de protección

Tras presentar la denuncia, la hija de María no recibió medidas de protección, porque la jueza Gaby Luz Garay Nalvarte, del 13º juzgado de familia, subespecializado en violencia contra las mujeres y los integrantes del grupo familiar, decidió: «No dictar medidas de protección porque no hay interacción ni acercamiento del denunciado a la presunta víctima, por lo cual, el riesgo a ser expuesta a nuevos hechos se ha enervado», es decir, no existe. «Pero la jueza no cuenta con que este hombre conoce mi casa y sabe que vivimos solas. Tenemos miedo», dice esta madre.

Respecto a la necesidad de medidas de protección en las denuncias de violencia de género, si bien es cierto, la Ley 30364 de en su artículo 2.6 señala: «El fiscal o juez a cargo de cualquier proceso de violencia, debe ponderar la proporcionalidad entre la eventual afectación causada y las medidas de protección y de rehabilitación a adoptarse. Para ello, debe hacer un juicio de razonabilidad de acuerdo con las circunstancias del caso, emitiendo decisiones que permitan proteger efectivamente la vida, la salud y la dignidad de las víctimas».

La jueza Garay Nalvarte, tendría que haber tenido en cuenta que a la otra joven denunciante, el primer caso ha sido publicado en teleoLeo.com, sí se le han otorgado medidas de protección que impiden a Meza Vera que se le acerque a menos de 100 metros, o se comunique con ella por cualquier vía, así como la repetición de cualquier acto de violencia, y ordena también «tratamiento reeducativo terapéutico para el agresor y tratamiento psicológico para la recuperación emocional de la víctima».

La jueza también tenía que haber tenido en cuenta que la denunciante es una menor de edad y por tanto una persona vulnerable, por otro lado, su razonamiento es, además, incomprensible, porque evidentemente una víctima y una supuesta víctima, por instinto de conservación, no entablará contacto con quien la ha, supuestamente, agredido; sin embargo, eso no impide que el denunciado se acerque a ellas y sin medidas de protección no hay como evitar que eso ocurra.

Abogado del CEM

La madre también se queja del desempeño del abogado que el MIMP le ha otorgado: «La jueza tuvo una decisión errónea, pero el abogado no habría apelado a tiempo, dice que sí lo hizo y que por mala señal la apelación no llegó cuando debía, pero es que luego de la decisión de la jueza tenía 5 días para apelar. No entiendo, la justicia del Estado no nos ayuda, no es posible que tengamos que endeudarnos y hasta embargarnos para poder defender a nuestras hijas».

La Ley 30364 también señala en sus disposiciones transitorias que: «El funcionario público que, ilegalmente, omite, rehúsa o retarda algún acto de su cargo será reprimido con pena privativa de libertad no mayor de dos años y con treinta a sesenta días-multa. Cuando la omisión, rehusamiento o demora de actos funcionales esté referido a una solicitud de garantías personales o caso de violencia familiar, la pena será privativa de libertad no menor de dos ni mayor de cinco años».

Descuentos y becas

Según María, desde julio de 2023, su hija no quería ir a clases con Meza Vera, pero ella, que gracias a las rebajas del profesor, ya había pagado un año de clases, le insistía para que fuera, porque pensaba que sólo se trataba de desidia adolescente. «Yo no entendía porque no quería ir a clases si le encanta el taekwondo y lo seguía practicando en casa, pero no quería, es más, se apuntaba a las actividades del colegio fuera del horario escolar, todo para no ir».

Lo mismo ocurrió con la primera madre entrevistada por teleoLeo.com, los descuentos y cuasi becas que, aseguran, les daba el profesor, hacía que ellas, mujeres trabajadoras, sin grandes ingresos económicos, ilusionadas porque sus hijas practicasen un deporte tan integral -como son las diferentes artes marciales- aceptasen agradecidas las facilidades y luego insistieran a sus hijas para que asistiesen a clases.

Estas madres también dicen que nunca sospecharon nada porque el profesor siempre les pareció una persona correcta y además religioso, según la primera madre entrevistada, oraba con sus alumnos antes de cada clase. María, la segunda madre añade que sí había algo en su comportamiento que la desconcertaba, pero que no la hizo sospechar nada lo que su hija le contó: «Cuando me acercaba para preguntarle cómo iba mi hija, me decía, bien señora y me daba la espalda y se iba».

Cámara Gesell

Las dos denunciantes cuyos testimonios están siendo publicados en teleoLeo.com, a pesar de haber denunciado a Meza Vera, en enero de este año, aún no han pasado por la entrevista única en cámara Gesell. Aunque tras la primera nota, la fiscal ha comunicado a la madre de la supuesta víctima que pasará esta pericia en junio, o sea, 6 meses después de haber denunciado. Esto es absolutamente revictimizante y perjudica la investigación, pues el paso del tiempo perjudica el recuerdo exacto de los eventos.

Las denuncias de abuso sexual o violación de menores de edad deben ser atendidas prioritariamente, sin embargo, en Perú, la programación de esta pericia fundamental, creada para evitar la revictimización de las y los menores de edad, actualmente, suele tardar un promedio de 6 meses en ser programada, con lo cual las víctimas viven con el peso de recordarlo todo y sin poder recibir tratamiento psicológico, y esto es un lastre que no les permite iniciar el proceso de sanación.

Todo esto ocurre a pesar de que el Protocolo de Entrevista Única para Niños y Adolescentes, contempla el principio de diligencia excepcional según el cual, «[…] la actuación del Estado exige la mayor celeridad, cuidado y responsabilidad por las posibles afectaciones que se puede ocasionar a una niña, niño o adolescente para adoptar una medida oportuna y eficaz para el ejercicio de sus derechos, teniendo en cuenta las circunstancias que las y los rodean y afectan, la valoración objetiva del impacto de estas en sus derechos […]». Tardar 6 meses para realizar esta prueba no responde a los criterios de celeridad ni de diligencia.

Posibles denunciantes atemorizadas

«Cuando mi hija y yo fuímos a denunciar, al decir que esto no sólo le había pasado a ella, le hicieron dar los nombres de otras compañeras de clase que hubiesen, supuestamente, pasado por lo mismo, ella dio el nombres de 5 chicas, también todas menores de edad, y el MIMP las llamó directamente a ellas y las estuvo interrogando, diciéndoles si estaban seguras de su denuncia, tras esa llamada se asustaron y se rehusaron a denunciar los abusos sufridos», señala esta madre.

…Pero el taekwondo no para

Cuando Meza Vera fue denunciado, las municipalidades de los distritos de San Borja y Surquillo, donde impartía sus talleres, fueron avisadas, la primera lo separó de inmediato, y el subgerente de educación, cultura, deporte y recreación, Roy Coleridge, en un documento manifestó que lo hacían «por la integridad de los niños y adolescentes que acuden a nuestros servicios».

La municipalidad de Surquillo tardó más de un mes en separar al profesor e informaron que las clases serían impartidas por su hijo. Actualmente la academia de Angelo Meza Vera, al parecer, estaría dando clases en el local del Sindicato de Trabajadores Obreros de la Municipalidad de Miraflores (SOMMI), así lo habría informado él mismo a su alumnado.

Esta es una captura de pantalla del chat de la Asociación Deportiva y Cultural Tkd Anmlee, propiedad de Angelo Gustavo Meza Vera, en ella, él estaría proporcionando, la dirección de lo que podría ser el nuevo espacio de entrenamiento, el local de SOMMI. En la captura se puede ver la foto de perfil del instructor indicando la dirección del lugar. teleoLeo.com escribió al chat del sindicato preguntando por las clases de taekwondo, pero no hemos recibido respuesta.

¿Qué falló? ¿Qué falla?

Las dos adolescentes que, a través de sus madres, han denunciado a Angelo Gustavo Meza Vera, en teleoLeo.com, habían recibido el mensaje claro de sus madres de que nadie las debía tocar y que si eso pasaba debían de decírselos, pero eso no ocurrió, pues según denuncias ellas manifiestan que habrían sido tocadas, por años, por el instructor. Entonces, ¿qué falló, por qué no hablaron antes con sus madres, si estas les habían dado la instrucción de hacerlo?

Nada falló, por parte de las adolescentes o de sus madres, lo que ocurre es que en estos casos en los que el denunciado es un maestro existe una relación de autoridad que condiciona la mirada de la víctima. Es más fácil para una niña detectar que algo no está bien o que le están haciendo daño si el victimario es un extraño, sin embargo, les es mucho más difícil detectar el mismo daño si quien lo ejecuta es alguien que se ha ganado su confianza y les ha dado atención.

La ESI en las escuelas es el arma fundamental para acabar con la cultura de violación

Lo que sí ha fallado y seguirá fallando, hasta que no se implemente, es la falta de educación sexual integral en las escuelas, porque si las, los y les menores de edad tuviesen un espacio fuera de casa, donde hablar sobre la dignidad de sus cuerpos, sobre el respeto a su desarrollo, sobre su sexualidad; en consecuencia, también tendrían un espacio donde compartir sus experiencias, donde contrastarlas y donde poder discernir y reconocer lo que está bien y lo que está mal.

Las dos adolescentes de estas denuncias sabían, por sus madres, que nadie debía tocarlas, pero nadie siempre es nadie, es decir, alguien sin nombre, alguien a quien no conocen, con quien no tienen relación. Para estas dos jovencitas quien -supuestamente- las habría tocado tiene nombre y apellido y tiene una relación con ellas.

No hay fórmulas mágicas ni palabras cien por ciento acertadas para proteger a nuestras criaturas, por eso necesitamos vencer la cultura de la violación con prevención, con información y con organización.

Las chicas que han denunciado a Angelo Gustavo Meza Vera dicen que los supuestos tocamientos habrían ocurrido dentro de taxis, la segunda denunciante dice, además, que la última vez que el instructor la llevó a su casa ella miraba por el retrovisor al conductor y que el conductor no hizo nada. Si como sociedad no se nos disparan las alertas al ver a una persona adulta tocar a una niña o a una adolescente, no vamos bien.

teleoLeo.com, seguirá haciendo seguimiento a este caso, tal y como hacemos con todos los casos que publicamos. Si eres víctima de violencia de género y/o violencia institucional envíanos un mensaje contándonos tu caso, por aquí o a nuestro mail: teleoleoo@gmail.com; y nos pondremos en contacto contigo para darte voz y para luchar por justicia.

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